sábado, 14 de junio de 2008

Nightwatching

Ayer fui a ver "Ronda de Noche" con José António.
Hace unas semanas había asistido a un coloquio con el director, Peter Greenaway en el (polémico) CaixaForum. La charla fue ciertamente interesantísima, y al igual que Christopher Doyle, Peter se deshizo en palabras de aliento para los futuros cineastas (sobretodo féminas). Durantes las dos horas que duró la conferencia, dio muchas claves para comprender su última película, especialmente en cuanto al contexto histórico (no me habría enterado de nada de no ser así) y proyectó material audiovisual moderadamente curioso.
Como era de esperar, no nos defraudó y pronunció su malfamada provocación: "el cine ha muerto".
Ante tal difamación, tuvimos que acercarnos a él y meterle un poco de caña. Vichu se lució en sarcasmo, e Igor le comentó que vaya una pena que justo ahora que el cine ha muerto haya rodado una película con la "RED camera" que tanto elogió. Después nos recomendó que mejor nos dedicáramos a otra cosa, y nos dejó tomarnos una foto con él:
Christian fue el verdadero protagonista de la velada. He aquí la frase por la que pasará a la historia: "Pero Peter, ¡cómo vas a decir que el cine ha muerto, si mañana estrenan Indiana Jones!!".
Evidentemente, no nos atrevimos a decírsela a la cara.

La película 'pintaba' mucho mejor de lo que acabó resultando. Le sobran los últimos 40 minutazos, en los que comienza a redundar en la conspiración, a darnos tres veces seguidas la información bien masticadita, no vaya a ser que no nos hayamos enterado de qué va la cosa. De pronto aparece un personaje crítico de la nada (yo diría que representa al propio Greenaway) para decirnos sin pudor alguno los fallos y virtudes del cuadro en sí. Nos tenemos que tragar minutos y minutos de aventuras amorosas aburridísimas del propio Rembrandt, y el amor de su vida resulta insulso y pobremente presentado.
A nivel estético tiene muchas cosas buenas, pero también me decepcionó bastante. A excepción de algunos planos generales Rembrandtescos indudablemente hermosos, el conjunto no está a la altura de anteriores películas suyas, y la estructura y el guión, en absoluto expermientales, salvo algún salto de eje al principio, es igual o incluso peor que cualquier película que tanto insulta de Martin Scorsese.

Si van, lárguense justo después de que muestren el cuadro terminado y así no saldréis con mal sabor de boca. O sino siempre pueden sacarse una foto artística después de verla para olvidar sus penas:

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si ya lo oyeron de viva voz, no entiendo que no entiendan.
Dead is dead.
Mostro